─Supongo que sí. No hay nada que lo prohíba.
─¿Cómo que no?, ¿y ellos? ─dijo elevando su dedo índice para señalarlos.
─Ellos no tienen porqué saberlo.
─Pero nos verán.
─Creo que no. No miran hacia este lado. Solo se preocupan de sus cosas. No te preocupes. ¡Vamos!
─No puedo, me da miedo lo que puedan hacernos.
─No seas tonta. Dame la mano y camina como si nada ocurriese.
─Pero y sí…
─¡Calla y camina!, no podrán verme.
─Pero yo lo hago.
─Claro, no te has tomado la pastilla.
Ummmmmmmm acabo de ir corriendo a la despensa a tomarme la mía jajaja gracias por recordármelo que ya notaba algún temblique.
ResponderEliminarCArmen
Uff así se empieza... Cuñi
ResponderEliminar¡Ah...!, pero... ¿se tenía que haber tomado la pastilla?, ¡la fastidiamos! ¿Y me lo dices ahora?
ResponderEliminarCARMEN: jajaja pues me alegro. Sería conveniente que pusieras alguna alarma en el móvil jajaja por aquello de prevenir posibles calambres. jajaja
ResponderEliminarCUÑI: y tu que lo digas jajaja. ¿te tomaste tu medicación? jajaja
JGERARDO: uf, lo siento. Igual hubiera sido mejor dejarlo pasar.