―...y
restos de lágrimas en la mejilla.
La
ponencia del decano había terminado con aquella sorprendente frase.
Todos quedamos pensativos observando la última diapositiva. Comenzó
el turno de las preguntas y los comentarios.
―Entonces
se puede afirmar que el sujeto varón murió llorando ―se apuró a
sentenciar Antonio para hacerse notar.
―Puede
―intervino el profesor de manera cortante porque no le gustaban las
afirmaciones hechas a la ligera― aunque no debe usted menospreciar
otros acontecimientos, que también justifican la presencia de esas
lágrimas en el rostro de nuestro sujeto, tales como: una alergia,
obstrucción del lagrimal, irritación...
Antonio
era mi contrincante directo para conseguir aquella plaza de profesor
asociado en la facultad, por eso me atreví a intervenir, sin mucho
pensar, en cuanto el profesor hizo la pregunta clave:
―Entonces,
¿porqué afirmo que esta pareja de momias son Adán y Eva?
―Es
evidente, a él le falta una costilla.
La respueta de la costilla es muy buena; evidentemente si era Eva, no creo que Adán muriese llorando porque lo dejó por otro;Por cierto Guille, espero que algún día, dediques una historia a contar tus aventuras en el colegio de monjas...ja ja
ResponderEliminarAdán sufrió mucho. En cuanto a lo del colegio d monjas... aún es material clasificado, pero quizás algún día....
Eliminar¿Cómo estaba tan seguro de que era ella?, tengo yo oído que el chaval era algo gañán, y le gustaba mucho poner el molino al viento, y no para refrescar las ideas. Ella, como se afirma, era otro caso distinto, pero esa..., con las monjas... es otra historia...
ResponderEliminarPues están haciéndole análisis y tal, pero todo perecía indicar que así era. En cuanto a lo de las monjas, me estoy dando cuenta que son todos o unos cotillas o unos viciocillos jajajajaja.
EliminarPos vas a tener que contar lo de las monjas, que yo también estoy intrigada....;-) Cuñi.
ResponderEliminarJajajaja ¡¡¡SERÁS COTILLA!!!!
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