viernes, 18 de diciembre de 2015
jueves, 10 de diciembre de 2015
«¿Y si los siete enanitos votaran?»
Extraída, sin permiso, de San Google |
Supongamos por un momento que los famosos siete enanitos del cuento de los Hermanos Grimm viven en la actualidad. Como buenos conciudadanos que son van a votar en las futuras elecciones pero, al vivir en el bosque, tan alejados de la ciudad rodeados de tantos peligros, deciden que ejercerán su derecho por correo.
Al llegar las papeletas y atendiendo a las características diferenciados de cada no de ellos, la cosa podría quedar más o menos así:
- Sabio: Decide leer con calma cada uno de los programas electorales, aunque ya sabe por quién va a votar.
- Gruñón: También accede a leer las distintas propuestas, pero lo hace desde el desencanto, protesta por todas ellas. no ve nada claro.
- Mudito: Siguiendo el ejemplo de sus hermanos, ojea, por encima, las propagandas que llegan a casa. No lo comenta.
- Dormilón: Eso de leer, la política, las propuestas…¡pufff!, menudo rollo.
- Feliz: Sus pensamientos están en otro cosa. básicamente se resumen en: todos son iguales; yo paso; a mi plin…
- Tímido: Lleva días observando. No sabe qué hacer. Mira lo que hacen los demás, escucha sus comentarios. Le domina el pensamiento ¿y si me equivoco?
- Mocoso: Se fía de sabio. Lo que vote él eso mismo hará.
Además ellos en el bosque hay un montón de personajes que se presentan por los diferentes partidos: el lobo, el leñador, Blancanieves, la abuela…
¿Podrías unir a cada personaje con un candidato/a? ¿Se asemejan los enanitos con las personas de tu entorno?
jueves, 3 de diciembre de 2015
«Mujeres, hombres y viceversa»
Imagen extraída, sin permiso, de San Google |
Más que el programa de televisión en sí, que me ha costado verlo, lo que llamó mi atención para escribir este post son los comentarios que la gente que sí que lo ve con asiduidad, hacen del mismo. Mucho de su público lo critica, incluso hay una campaña en las redes para que lo quiten, por machista y no sé que cosas más, pero para hacerlo imagino que lo ven.
Sin duda alguna «Mujeres, hombres y viceversa» es, cuando menos, un sorprendente entretenimiento para el que participar, como público, hay que tener cierto estómago y, para hacerlo como participante, hay que carecer de neuronas o, al menos, demostrarlo.
Aún no tengo muy claro de qué va el asunto, pero por lo que pude deducir hay uno o una de los concursantes que se sienta en una especie de trono y va concertando citas, para ver con cuál de los demás presentes se queda. Se entiende que para entablar una relación lo más movida posible, que después discutirán en el plató, emitirán cortes, se engañarán, criticarán…, y así poder sacar las bajezas más increíbles con las que poder vender el programa.
A ojo de buen cubero, lo que sí que me ha quedado claro es que el casting lo hacen teniendo en cuenta las siguientes variables:
- Para las chicas: Lo importante son las curvas, pechos, glúteos, labios y pómulos. Los tatuajes parecen puntuar extra.
- Para los chicos: Lo importante son los bíceps, tríceps, pechos, glúteos, labios y pómulos. Los tatuajes parecen puntuar extra.
Además, en ambos casos, ser escandoloso/a, tener ganas de exhibirse y ser una persona sueltita de tuercas, parecen ser valores a tener en cuenta.
Son mucho los chistes que van pululando por las redes sociales sobre el programa y sus espectadores que, sin duda alguna, son mujeres, hombres y viceversa, aunque de ellos hay quien piensa que viceversa significa bisexual. En fin, cosas de la pluralidad cultural de nuestro país.
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